El arte de calentar

JOSÉ FERRÁNDIZ LOZANO [www.joseferrandiz.com]

15 mayo 2002

En declaraciones a una emisora de Asunción que nos ha hecho llegar la agencia Efe, el portero de la selección paraguaya de fútbol, José Luis Chilavert, ha empezado a calentar el ambiente de cara al Mundial. El grandullón ha dedicado a la selección española, con la que su equipo se cruzará en la primera fase, uno de sus dardos envenenados: "Si jugaran en Sudamérica seguro que no se clasifican". Es más, por si algún aficionado español no quedara contento con semejante provocación y le sonara a poco, el cancerbero paraguayo ha añadido otras lindezas: desde el "vamos a ver a los toros cuando estén ahí adentro" a amenazar con meterle un gol a Cañizares si saca una falta contra España.

La verdad es que aunque este tipo de comentarios no son imprescindibles, viniendo de Chilavert la cosa merece algo de atención. No sería elegante ignorar y desmerecer a este simpático grandullón, a sabiendas de que la indiferencia, a buen seguro, le ofendería. Hay que ser, además, respetuoso con el prójimo y reconocer que el tal Chilavert, cuando juegue contra España, se enfrentará tan sólo a un ramillete de futbolistas malpagados que hacen lo que pueden en clubs tan desconocidos en el continente como el Real Madrid, el Barcelona, el Valencia o el Dépor, mientras que él, en esta última temporada, ha demostrado sus singulares habilidades en un potente y conocidísimo equipo europeo de la segunda división francesa: el no sé qué de Estrasburgo. Por otra parte, tampoco conviene desairarle, teniendo en cuenta que, según todos los indicios, la cara sigue siendo el espejo del alma. Y me da la espina de que este hombre arrastra algún cabreo permanente, a juzgar por la cara de perdonavidas que pone. Para que se hagan una idea, es como si le acabaran de machacar un juanete o como si padeciera un estreñimiento de días.