Tiro al joven

JOSÉ FERRÁNDIZ LOZANO [www.joseferrandiz.com]

23 febrero 2002

¿Quién ha diseñado el sistema educativo que pone en entredicho los saberes de jóvenes estudiantes? ¿Quiénes programan la televisión que luego ven, la que rinde culto a la nada y a la fama de baratillo? ¿Quiénes traman los planes de marketing de las empresas que lanzan a esa misma juventud al consumismo insaciable? ¿Quiénes son sus padres? ¿Quiénes detentan, en definitiva, el poder y toman decisiones?

Durante estos días en los que se practica el tiro al joven, en los que no es difícil leer y oír comentarios que culpan a la juventud de su desinterés o de darle al botellón, durante estos días, digo, es bueno formularse estas preguntas, aunque sea tan sólo para comprobar que tienen una misma respuesta. Quienes han diseñado sus sistemas educativos, quienes programan la televisión, quienes elaboran las estrategias de marketing, quienes ejercen de padres y quienes toman decisiones desde el poder son —somos— los adultos. Entonces, ¿de qué puñetas nos quejamos? ¿Por qué adjudicamos a la juventud entera su cara menos amable, callándonos sus virtudes? ¿Por qué no hablamos, también, de los que se esfuerzan con sus estudios, de los que se comprometen con la sociedad, de los solidarios, de los que se interesan por la cultura, de los que se mejoran con el deporte?

¿Y con qué autoridad moral les recriminamos? ¿Acaso no son adultos quienes han protagonizado casos de corrupción política y empresarial? ¿Es que no hay adultos violentos? ¿No hay adultos en la audiencia de la tele-basura? ¿Quién ha fracasado, pues? ¿Ellos o nosotros? Hace cien años que Unamuno escribió una frase y resulta que un siglo después todavía merece atención, por si cunde la advertencia: "El problema más grave en España es que hay que educar a los jóvenes para una vida nueva, y que no pueden educarles para ella los formados en una vida vieja".