De Roosevelt a Duhalde

JOSÉ FERRÁNDIZ LOZANO [www.joseferrandiz.com]

6 febrero 2002

En 1932 el demócrata Roosevelt ganó las elecciones presidenciales en Estados Unidos. El anterior gobierno, republicano, había caído en desprestigio por el "crack" del 29 y sus propias corruptelas administrativas. Sólo en 1929 quebraron cinco mil entidades bancarias, arrastrando en su caída a millones de impositores, y justo dos días antes de tomar posesión Roosevelt los gobernadores de veintidós Estados ordenaban el cierre de las oficinas de los bancos supervivientes, incapaces de atender ya el pago de un talón. Tras jurar su cargo, el nuevo presidente pronunció un discurso. "Lo único a lo que debemos temer es al propio temor", avisó entre otras cosas. Y ese mismo día decretó unas breves vacaciones bancarias para reaccionar. No tardaría en iniciar en la radio sus "Charlas junto al fuego" para dirigirse al país. En su primera intervención no sólo anunció que los bancos iban a abrir al día siguiente sino que convenció a sus oyentes, valiéndose de argumentos creíbles, de que ingresaran sus fondos sin desconfianza. Con ésta y otras medidas —las de su conocido "New Deal"— los gobiernos de Roosevelt sacaron a Estados Unidos de la crisis.

La historia se repite. Y ahora ocurre que la Corte Suprema argentina pone al gobierno entre la espada y la pared, tras declarar inconstitucionales las limitaciones a los clientes de bancos para disponer de sus fondos. No hay duda de que las medidas gubernamentales atentan al derecho de propiedad, como no hay duda de que la concurrencia masiva de los depositantes a retirar sus pesos asegura la quiebra financiera y, con ella, la de todos los argentinos. Si el gobierno insiste en mantener las limitaciones el conflicto social posiblemente se acentuará; si acata la sentencia —solución descartada— el país se cae. El reto es para estadistas. Y ya sería bonito que Duhalde se pareciere en algo a Roosevelt. Aunque no sea su estilo y aunque sea mucho pedir.